Mostrando entradas con la etiqueta AGM-158B. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta AGM-158B. Mostrar todas las entradas

martes, 4 de agosto de 2020

Ejercicios con misiles AGM-158B sobre el Mar Negro


El pasado 22 de julio se han llevado a cabo unos ejercicios en el espacio aéreo internacional sobre el Mar Negro, liderados por el US Army Europe y en las que han participado miembros de U.S. Naval Forces Europe, SOCEUR (Special Operations Command Europe) y USSPACECOM (United States Space Command).


Entre los activos que participaron en la operación había F-16C pertenecientes al Ala 31 de combate de la USAF con base en Aviano (Italia); Stratotankers KC-135 pertenecientes al Ala 100 de reabastecimiento aéreo de la RAF con base en Mildenhall (Reino Unido); UAVs MQ-9 Reaper pertenecientes al segundo destacamento del Grupo 52 de Operaciones Expedicionarias con base en Miroslawiec (Polonia); el USS Porter (DDG78) perteneciente a la VI Flota de la US Navy y el Escuadrón de patrulla (VP-4) P-8 Poseidon perteneciente al CTF-67 con base en Sigonella (Sicilia).


En cuanto a los ejercicios llevados a cabo, estos incluyeron el uso simulado de misiles de crucero aire-tierra, más concretamente los AGM-158 JASSM (Advanced Guided Missile 158 Joint Air-to-Surface Standoff Missile) cuyo alcance excede las 200 millas náuticas (370 Km) y los AGM-158B JASSM-ER (Advanced Guided Missile 158 Joint Air-to-Surface Standoff Missile - Extended Range) cuyo alcance excede las 500 millas náuticas (926 Km).


En ambas variantes estamos hablando de misiles crucero de baja visibilidad que se lanzan desde una plataforma aerea y que van armados con una ojiva de penetración/explosión/fragmentación de 1.000 libras (453 Kg). Cuentan con un avanzado sistema de navegación GPS/Inercial con sistema anti-jam asistido por un buscador de infrarrojos; el GPS guía el misil hasta la ubicación geográfica del objetivo y una vez allí, utiliza el buscador de infrarrojos para detectar el punto más caliente de su objetivo y asestar allí con precisión el golpe mortal.

martes, 24 de marzo de 2020

Análisis técnico del AGM-158C


Siguiendo la hoja de ruta del proyecto OASuW (Offensive Anti Surface Weapon) la US Navy ha puesto ya en producción un misil antibuque de última generación, creado en base a una modificación del AGM-158B, misil de crucero sigiloso y altamente preciso desarrollado por Lockheed Martin, que vuela hacia su objetivo casi rozando la superficie, pudiendo alcanzar objetivos ubicados a una distancia de hasta 997 kilómetros.


Lockheed Martin ha seguido adelante con el desarrollo, y el resultado ha sido el misil AGM-158C, reconocido por la US Navy como un misil antibuque de largo alcance, técnicamente un LRASM (Long Range Anti-Ship Missile). Este nuevo desarrollo de Lockheed incorpora un sistema de navegación basado en GPS inercial, está propulsado por un motor F107 de alta eficiencia, y va armado con una ojiva de 453 Kg., del tipo penetración / fragmentación.


Dado que se trata de un misil pensado para destruir buques a larga distancia y éstos son objetivos móviles, Lockheed lo ha dotado de un sistema de guía basado en Inteligencia Artificial, que permiten al misil buscar, identificar y clasificar de forma autónoma cada blanco potencial, pudiendo distinguir entre buques amigos, buques enemigos civiles, buques de guerra enemigos de baja prioridad, y buques de guerra enemigos de alta prioridad. Esto no quiere decir que sea un misil concebido para llevar a cabo misiones de forma autónoma prescindiendo de las decisiones humanas, sino todo lo contrario: El misil se lanza siempre contra un objetivo designado por humanos, comunicándose en todo momento con humanos gracias a un enlace de datos bidireccional. Ahora bien, en caso de que se interrumpa el enlace de datos, el misil pone en marcha el sistema autónomo que le permitirá seguir viajando hacia su objetivo, maniobrar alrededor de naves neutrales u hostiles que se interpongan en su camino.


En cuanto a la orientación del misil hacia su objetivo, no se basa en un sistema de radar, sino todo lo contrario: en lugar de exponerse utilizando su propio radar para buscar un objetivo, el misil se guía por un buscador RFS (Radio Frequency Signals) que capta las señales emitidas por el radar del buque enemigo, orientando el misil hacia él. Pero ya en la etapa terminal, el misil desciende hasta rozar la superficie marina, y entrega el control de orientación a un sensor infrarrojo que ofrece suficiente fidelidad para apuntar a ubicaciones específicas del buque a fin de poder causar el máximo daño. Por lo demás, tan sólo queda añadir que, para asegurar el hundimiento de todo tipo de buques con independencia de su tamaño, el sistema de Inteligencia Artificial de este nuevo misil posibilita lanzar varios misiles a un mismo blanco, y que éstos se comuniquen entre ellos para llevar a cabo un ataque de enjambre simultáneo que provoque múltiples daños, abocando al buque a una situación irremediable.